La promoción de las formas de movilidad no motorizadas debería ser un objetivo a perseguir por las distintas administraciones, y muy especialmente por los ayuntamientos, ya que es en el ámbito local donde los desplazamientos peatonales y en bicicleta son más importantes.

El uso de la bicicleta en las ciudades implica menor peligrosidad en las calles, menor contaminación, mejora la salud de quien se desplaza y, en definitiva, aporta calidad de vida para los ciudadanos y ciudadanas.

 El viernes 20 junio, EQUO intervendrá en el pleno,solicitando al Ayuntamiento, un impulso a la movilidad sostenible en Rota

La bicicleta, es la alternativa perfecta para moverse por la ciudad, por la velocidad óptima que desarrolla en el entorno urbano. Además, no ocupa mucho lugar y es el complemento ideal al transporte público.

Rota es una ciudad que por sus características es perfecta para la movilidad en bicicleta. Pero para que se desarrolle el Ayuntamiento debe hacer un esfuerzo en su promoción, es necesario acabar con el mito de que las bicicletas son sólo para recreo o deporte y no para transportarse o para trabajar.

El pasado 14.03.2011 la Concejal María Ángeles Sánchez Moreno, informaba en un escrito diciendo "que Rota quedó, en el año 2002, adherido al Programa de Sostenibilidad Ambiental Urbana Ciudad 21 (impulsado por la Consejería de Medio Ambiente), y que tiene como objetivo mejorar la calidad de vida de los ciudadanos de nuestro municipio, mediante la implantación de medidas relacionadas con el medio ambiente urbano, iniciando así el camino para avanzar hacia un desarrollo sostenible".¿? (suponemos que quería decir desarrollo de la movilidad sostenible). Dentro de este programa se encuentra el fomento del uso de la bicicleta mediante la construcción de vías ciclistas como estrategia de lucha contra el cambio climático. Así, surge la idea de habilitar un carril bici por el Paseo Marítimo, que es la única posibilidad de comunicar el casco urbano del municipio con las vías ciclistas ya existentes."

Desde EQUO creemos que esta no es la única posibilidad, cada día existe en más ciudades la calzada compartida, limitada a 30 km hora para vehículos a motor, que bien podría incluir todas las calles del centro de Rota con el mismo argumento que seguía citando la delegada, "se parte de la idea de que los espacios públicos deben ser compartidos, debiéndose integrar en los mismos distintos tipos de usos."

Seguía diciendo:

"Por ello, estos carriles tendrán un uso temporal, no estando operativo en la época estival, debido a la gran afluencia de personas que utilizan dicho paseo. Sin embargo, en invierno el tránsito de personas es menor, siendo compatible el uso peatonal con la circulación de bicicletas." (Recordar que 104000 euros fue el gasto de dinero público empleado para uso de este carril sólo durante 8 meses al año).

Con este mismo argumento, podríamos plantearnos que debido a la gran afluencia de vehículos a motor en época estival, deberían no estar operativas las estrechas calles de nuestro casco antiguo, teniendo sólo un uso peatonal y ciclista, dejando paso sólo a los vehículos de los vecinos de la zona, de aquellos que tengan plazas de parking en propiedad, de los accesos a hoteles para subida y viajada de viajeros y la carga y descarga de proveedores en las primeras horas del día como ya se hace en decenas de ciudades Europeas.

Con estas actuaciones reduciríamos las emisiones de gases con efecto invernadero, disminuiríamos el consumo energético, aumentando la calidad del aire, reduciendo el ruido y los riesgos de accidentes , convirtiendo en verano a Rota, en una ciudad más amable con vecinos y turistas.

El sistema de transporte multimodal e integral, debe asentarse sobre una triple alianza, a pie,en bicicleta y en transporte público colectivo.

Sólo los ayuntamientos que desarrollen antes este modelo, tendrán éxito en el futuro cercano, al que la escasez de combustibles fósiles y por tanto su progresivo encarecimiento, nos obligarán a tomar medidas alternativas al transporte privado que conocemos.

Por todo ello pensamos que, el Ayuntamiento de Rota, debe hacer un esfuerzo por compatibilizar todos estos criterios dentro de la ORDENANZA MUNICIPAL REGULADORA USO VIAS CICLISTAS a la que seguimos esperando respuesta a las alegaciones presentadas por EQUO y otros colectivos el pasado septiembre 2013.

Por otra parte, la bicicleta es un producto que se adapta como un guante a las políticas de fomento de la movilidad sostenible, especialmente en los ámbitos urbanos. De hecho, el informe de la Asociación de Marcas y Bicicletas de España, llama la atención acerca de las ventas crecientes en España de bicicletas urbanas, pese a que todavía representan una fracción pequeña (7%) de un mercado aún dominado por las bicicletas de montaña (63%). También recalca el creciente potencial de ventas de las bicicletas eléctricas (10.000 unidades en 2013) y el potencial de los sistemas de bicicletas públicas, sectores ambos que generan un gran valor añadido.

Las cifras anteriores tienen lecturas diversas. Se puede pensar que, de todos modos, el sector de la bicicleta es y seguirá siendo un sector marginal de la economía española, al que no merece la pena prestar gran atención. Pero se puede pensar también que es un sector con gran proyección de futuro en el marco una política de fomento de la movilidad sostenible en las ciudades españolas, que posee además una gran capacidad de generación de empleo y cuyo fomento podría ofrecer alternativas viables de generación de riqueza y empleo en el marco del cambio de modelo productivo que todos parecen estar de acuerdo en que es necesario para salvar la actual crisis económica.

¿Estamos de acuerdo en Rota? Entonces impulsemos la movilidad sostenible.